EL PROBLEMA DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR Y LA NECESIDAD DE FORTALECER LA LUCHA ANTIIMPERIALISTA

A fines del año recién pasado el Gobierno y las distintas federaciones estudiantiles firmaron un acuerdo para el financiamiento de la Educación Superior, en el que se comprometían a cubrir el 100% del arancel a los estudiantes que provienen del 60% de las familias más pobres del país, asignando las tradicionales becas y crédito de fondo solidario, más un nuevo sistema de préstamos a largo plazo llamado 'crédito con aval del Estado'.

Distintas federaciones celebraron este acuerdo como si fuese un gran triunfo. Mientras, el revisionismo y el radicalismo pequeño burgués guardaban un cómodo silencio. Veamos las implicancias de este acuerdo.

1º problema: La división en quintiles obvia el necesario análisis de clases:

Tanto gobierno como el revisionismo y el radicalismo pequeño burgués al momento de analizar los problemas fundamentales de la educación utilizan las categorías de la sociología burguesa dividiendo arbitrariamente el universo de estudiantes en quintiles o deciles de acuerdo a los ingresos per capita de sus familias, en lugar de analizar científicamente la sociedad, vale decir, de acuerdo a su estructura de clases.

La pregunta que debemos hacernos los comunistas para realizar un análisis de clase es ¿cuáles son las clases antagónicas en Chile? Es decir, quienes son los amigos y quienes los enemigos. Son amigos todas las clases que forman parte del pueblo y que sufren con la opresión de la gran burguesía monopólica nacional o imperialista, quienes por su parte, son nuestros principales enemigos.

El pueblo lo conforma más del 90% de la población. El estudiantado también refleja esta situación y por lo tanto tiene un enemigo principal en la gran burguesía monopólica y el imperialismo; estos sectores opresores representan menos del 5% del país. A esta clase pertenecen los Luksic, Angelini, Matte, entre otras familias de grandes propietarios monopólicos.

Al dividir la sociedad en quintiles soslayamos los antagonismos de clases y la lucha irreconciliable contra nuestros principales enemigos. Dicha división artificiosa e interesada es contraria a la concepción proletaria del mundo. Se opone teóricamente a la tarea de conformar un polo popular y revolucionario con el proletariado a la cabeza, minando a su vez la unidad del pueblo contra sus principales enemigos, ya que homogeniza a la gran burguesía, propietaria de poderosos medios de producción, con otros sectores de las masas que se ven de uno u otro modo afectadas por los grandes monopolistas pro imperialistas.

Por otra parte, el Gobierno al ofrecer una solución de financiamiento tan sólo a los tres primeros quintiles, con lo que en la práctica responde a las necesidades de menos de la mitad de los estudiantes de educación superior. La mayoría de los estudiantes deberán seguir financiando su educación sin ninguna ayuda económica.

2º problema: el Estado se responsabiliza del financiamiento de la educación tan sólo de manera aparente:

La promesa del Estado es otorgar la facilidad de financiamiento a menos del 50% de los estudiantes de la Educación Superior. Sin embargo, no se hace cargo de este financiamiento, sino que tan sólo facilita el endeudamiento de estos jóvenes con las instituciones financieras.

Cumpliendo con lo demandado por el imperialismo mediante las exigencias del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, el Estado chileno -servil al imperialismo- facilita lo que ellos denominan 'políticas de demanda'; es decir, prima la capacidad de pago del estudiante. En este sentido, el Estado otorga mayores facilidades a los estudiantes de las carreras más rentables a futuro, y sólo otorga facilidades para acceder a los nuevos créditos, no así para su futura cancelación.

Además, este nuevo crédito tiene una tasa de interés de más del 6%, cercana a las tasas de interés de un crédito de consumo cualquiera.

3º problema: el Arancel de Referencia:

Un nuevo problema surge con este acuerdo: el arancel de referencia. El Estado se vanagloria de cubrir el 100% del arancel de los estudiantes pertenecientes a los tres primeros quintiles, pero no menciona claramente que cubrirá sólo el 100% del arancel de referencia.

El arancel de referencia es un promedio de los aranceles entre el año 97 y el año 2000. Es decir, un arancel mucho más bajo que el arancel real a cancelar por el estudiante. Lo que no cubre las becas o el crédito tendrá que ser cubierto por las propias universidades o los estudiantes.

4º problema: mano de obra barata y calificada. Un mandato del imperialismo.

Esta 'gran idea' del Estado responde a otra de las exigencias de los organismos financieros del imperialismo en educación, que es el aumento de la cobertura en educación superior.

Desde el año 92 a la fecha la matrícula, tan sólo de las universidades tradicionales, se ha duplicado. El total de los matriculados en la Educación superior son más 600.000 (incluyendo las universidades tradicionales, privadas, centro de formación técnica e institutos profesionales). Con ello, la mano de obra calificada en nuestro país aumenta, y se costea principalmente con recursos privados (los de los estudiantes y sus familias). De esta forma, los técnicos y profesionales se multiplican, el trabajo se cualifica, y de paso disminuyen los sueldos a pagar por el aumento de la competencia.

Como nuestro país es dominado por el imperialismo -principalmente norteamericano- son ellos quienes se ven más beneficiados con este aumento de la cobertura en educación; ya que las ganancias del trabajo producido en Chile son recogidas por la gran burguesía monopólica y por las inversiones del imperialismo.

Sin democratizar la sociedad en su conjunto es imposible democratizar la educación.

Vemos entonces que la mera ampliación de la cobertura en educación y la ampliación de los mecanismos de financiamiento no es sinónimo de mayor democratización de la educación.

Si el trabajo realizado en nuestro país sigue beneficiando y sirviendo a un puñado de hombres y mujeres, si la propiedad de los medios de producción sigue concentrándose en pocas manos, todas las reformas en educación estarán al servicio de unos pocos. Es por ello que los comunistas tenemos que enfrentar el problema de la Educación Superior fortaleciendo la unidad de todos los sectores que pertenecen al pueblo, abordando este tema en unidad con los estudiantes de las universidades tradicionales, las universidades privadas, los centros de formación técnica y los institutos profesionales.

¡Impulsemos las movilizacione sestudiantiles!
¡Analicemos el problema de la educación realizando un análisis de clase!
¡Elaboremos plataformas de lucha que apunten a la unidad de los estudiantes en lucha contra nuestros principales enemigos: la gran burguesía monopólica y el imperialismo!